El Cabildo destinará 16.000 euros a este proyecto de dinamización social. El Ayuntamiento, por su parte, aportará 10.000 euros y habilitará un local como sede del Consejo de la Ciudadanía de La Graciosa
El Cabildo de Lanzarote y el Ayuntamiento de Teguise continúan dando respuesta algunas necesidades y reivindicaciones demandadas por la isla de La Graciosa. Tras las inversiones que se han realizado en el ámbito deportivo y cultural y las que se ejecutarán en éstas y en otras materias, ambas instituciones dan respuesta ahora al aspecto social a través de la firma de un convenio de colaboración que tiene por objeto cofinanciar un proyecto de dinamización social para el Consejo de la Ciudadanía de La Graciosa.
El presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro San Ginés, y el alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, acompañados por el consejero de Participación Ciudadana de la primera Corporación, Juan Antonio de la Hoz, rubricaron el documento ayer por el que ambas administraciones se han comprometido a dotar a este Consejo de la Ciudadanía de los medios e infraestructuras adecuadas para el impulso y desarrollo de las funciones para las cuales fue creado dicho organismo de dinamización social en la octava isla.
El Ayuntamiento de Teguise habilitará una de las oficinas municipales para albergar las instalaciones del Consejo de la Ciudadanía de La Graciosa y destinará una cuantía de 10.000 euros que se sumará a los 16.000 euros que aportará el Cabildo de Lanzarote para el impulso del proyecto de dinamización social que se desarrollará a través de la figura de un dinamizador social y del propio movimiento ciudadano.
Tanto el presidente del Cabildo como el primer edil de Teguise mostraron su satisfacción por la rubrica del convenio que “viene a retomar el impulso de una iniciativa ciudadana, como es el Consejo de la Ciudadanía, que creemos ha sido algo ejemplar en toda Canarias, pero que precisaba de que las administraciones respaldáramos con un convenio como éste. Las administraciones debemos ser consecuentes con aquello que predicamos como es facilitar los instrumentos para que esa participación ciudadana sea efectiva”, explicó Pedro San Ginés.
Por su parte, Oswaldo Betancort sostuvo que “el propio Consejo de la Ciudadanía de La Graciosa demandaba la figura del dinamizador social para desarrollar su propia actividad y que a través de estas aportaciones económicas, al menos durante un año, el Consejo podrá seguir trabajando y dinamizando la vida social de la isla de La Graciosa”.