¿A quién voto?
El próximo domingo, día 26 de junio, se vuelve a convocar al soberano elector para que decida quiénes conforman el poder legislativo y quién gobierna este país. Realmente, se elige a los electores del presidente, a quienes van a decidir quién preside el gobierno, que será, después, el encargado de elegir a los ministros que conformarán su gobierno. Cuando hay mayorías absolutas, o se rozan, la cosa no es tan evidente. Parece que son los ciudadanos los que eligen presidente. ¿Gana el partido socialista? Pues entonces el presidente es Felipe González o José Luis Rodríguez Zapatero. ¿Gana el PP? Pues ídem de ídem, primero José María Aznar y, luego, Mariano Rajoy. Pero de eso ya no queda nada. Ahora, abandonado el bipartidismo centro-derecha (PP) y centro-izquierda (PSOE), las cosas son más evidentes y se complican. Los ciudadanos saben que ellos cumplieron el pasado 20 de diciembre. Fueron a votar y votaron, incluso, más electores que en las anteriores. Ellos saben que cumplieron eligiendo a los 350 diputados y a los senadores por su circunscripción. Conformaron el Congreso de los Diputados ( que les cuesta una fortuna financiar) y, al final, sus señorías decidieron que el pueblo estaba equivocado, que tenía que votar distinto. Y en eso estamos.
Entonces, claro, puestos en esa tesitura, hay que hacerse una serie de preguntas y encontrar la respuesta antes de penetrar la urna de nuevo. Habrá que saber primero quién o quiénes estaban equivocados. ¿Todos? ¿Estábamos equivocados todos? ¿Cada uno de los electores? ¿Todos tenemos que votar distinto para que las cosas sigan igual que antes o cambien del todo?¿Estaban equivocados sólo los que votaron al PP? ¿Estaban también equivocados los que votaron al PSOE, a Podemos y a Ciudadanos? ¿ Y ahora qué hacemos? ¿ Los que votaron al PSOE votan al PP y los que votaron al PP al PSOE y los de Podemos y Ciudadanos se intercambian? ¿ O sólo unos debemos cambiar? ¿Y quiénes son los unos y quiénes son los otros? En fin, de locos.
No se dan cuenta que precisamente para estos casos, en otros países inventaron la segunda vuelta. En ella, se reducen los candidatos, pasando sólo los dos más votados. Así los electores que votaron a los partidos que no pasan tienen que volver a elegir porque la realidad es otra. Pero en este caso, en España, no. Es exactamente lo mismo. Y además presumen de que sea así. Los mismos candidatos, los mismos programas, hasta las mismas chorradas y bromitas. ¡Y ahí les queda eso! Y ahora voten. Pero, cuidado, no voten lo que quieran. Que eso ya lo hicieron las pasadas elecciones y ya vieron como nos fue. En estas, hay que votar lo que ellos quieren porque si no "reinan" y no se ponen de acuerdo y nos cobran sus sueldos de parlamentarios para no hacer nada ( "o más nada", que nada suelen hacer hasta cuando eligen gobierno).
Sinceramente, son los mejores del mundo quitándose responsabilidades y cargando al pueblo de traumas e impuestos. Ya puestos a cambiar, lo lógico hubiese sido que ellos, incapaces de hacer una ley que solvente estas exigencias, hubiesen puesto cambios significativos en las candidaturas, en los programas y hasta las alianzas. En este sentido, hay que reconocer que Unidos Podemos es el único que ha sido capaz de presentar una cosa distinta sin alterar lo básico. Como se ve que saben de política y sociología, sumaron a los de Izquierda Unida para que con, incluso, menos votos que en las pasadas elecciones sean más escaños y no dejan de invitar al PSOE a un gobierno con el único propósito de situarse electoralmente en su espacio. Las encuestas, por el momento, vienen a decir que el único que se ha movido es el que sale bien en la foto. A los otros tres les basta con repetir hasta la saciedad lo buenos y constitucionalistas practicantes que son. Estoy hasta por abstenerme y no ir a votar. ¿Qué eso también beneficia al PP? Si al final, todo beneficia al PP. Si votas a Podemos y se produce el "sorpasso" beneficias al PP, porque el PSOE no quiere suicidarse haciendo presidente a Pablo Manuel Iglesias. Si votas a Ciudadanos acabarás beneficiando al PP, que conseguirá que se abstenga para que gobierne en minoría. ¡Si al final lo único que se va a poder hacer para que no gobierne Rajoy es votar al PP! ¡Política!