Cita con los gerentes
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, se reunirá, el próximo lunes 26, o sea, mañana, a las 10.00 horas, con los gerentes de los hospitales de Canarias. Los cita, y a toque de pito, los tiene delante. En estas citas, no hay listas de espera. Aunque los gerentes están que trinan.
La última vez que les llamó el presidente no fue para subirles el sueldo, precisamente. Tampoco, para felicitarles por su trabajo. Mucho menos para darles ánimos ni más recursos. Por descontado, no mostró el más mínimo interés por la situación de las listas de espera, las infraestructuras sanitarias o sus equipamientos, ni tan siquiera habló de la creciente dependencia que estaba alcanzando la sanidad pública de la privada creada "ad hoc" para atender servicios externalizados durante la gestión de nacionalistas y populares. Evidentemente, Clavijo no convocó en aquella ocasión, hace unas semanas, a los "comandantes" de la sanidad con mando en plaza de los hospitales canarios para solucionar los problemas que encuentran los canarios cuando acuden a un centro sanitario. El objetivo no era reducir listas de espera, mejorar el servicio ni dotarla con más profesionales y mejores equipos. ¡Qué va, ni hablar de eso! Clavijo les convocó directamente, en una clara desautorización del consejero socialista, para echarles un "rapapolvos" y decirles que gastaran menos, que ahorraran, que se desentiendan de contratar más servicios, ampliar plantillas o estabilizar a la actual.
Eso, ahora mismo, es lo de menos. Ahora toca cumplir con el déficit; lo importante, ahora, es quedar bien ante Madrid, ante Europa y seguir en la Champions Ligue con Galicia y País Vasco. ¿Que esto nos puedes costar vidas? ¿Que esto puede empeorar la calidad de vida de miles de canarios que son enfermos crónicos o enfermos a secas? ¿Pero qué es eso comparado con el cumplimiento del déficit? ¿Ustedes han visto que en la España actual le pongan una medallita a ningún político por otra cosa que no sea el control del déficit y el estrangulamiento consciente de los más débiles?
Mañana, Clavijo se cuadrará delante de los ya temerosos gerentes de la decena de hospitales públicos canarios y les explicará aquello del cierre anticipado (¿o precipitado?) de los presupuestos de la Comunidad Autónoma de Canarias "por precaución" o "por prudencia" y que se exige su estricto cumplimiento. Esto último, si hiciera falta, "por cullons", que en catalán no suena tan feo. Y aunque alguno habrá que le diga algo relacionado con el coste que tienen "estas exigencias en la salud de los canarios", la mayoría acatará sin reparo porque también ellos son cargos de libre designación del gobierno. Muchos lo harán sin ganas porque, entre otras cosas, a ellos los propuso el consejero socialista y es el presidente nacionalista quien los tiene allí firmes a todos. Lo harán a disgusto, además, porque les dijeron que el PSOE cogió Sanidad en el reparto porque quería invertir el "sinvivir" y deterioro que sufría la sanidad en Canarias después de años y años en manos de nacionalistas y populares. Es como si de golpe se hayan dado cuenta que están trabajando para un gobierno presidido por un destacado dirigente de CC. Como si hubiesen descubierto, de golpe y porrazo, que quien manda aquí y ahora no es el partido socialistas ni su hoja de ruta sanitaria.
Y como si de un golpe se tratara también, Clavijo, en pose marcial, entre ida y venida por el margen derecho de la sala de reunión, dictará las obligaciones que hay que cumplir en el toque de queda al que ha sumido a la tropa hospitalaria. Mañana, cerrado el presupuesto, Clavijo les leerá la única lista que quieren que tengan en cuenta estos cuatro meses, en principio, y ya veremos si también los próximos cuatros años. Será como la lista de la compra pero al revés. Habrá una lista larga de cosas precedidas por un esclarecedor y repetido "Esto no, esto no, esto no".
¡Gereeeenteeees, rompan filas! y con ellas, la sanidad canaria. Aplauso fúnebre, las funerarias suelen ser generosas.