Podemos denuncia que la población de Uga “se pronuncia contra la falta de participación” del Ayuntamiento de Yaiza en “decisiones cruciales”
- Redaccion
Podemos expresa su apoyo a la población de Uga, en el municipio de Yaiza, que se ha “manifestado enérgicamente contra la desconsideración por parte del Ayuntamiento en la toma de decisiones que afectan directamente a su entorno social y cultural”. El reciente derribo de los muros que rodean el espacio del templo de Uga “ha generado malestar entre los vecinos, quienes expresan su desaprobación ante esta acción unilateral”.
Desde la perspectiva de Podemos, “la población de la isla está experimentando un cambio en su tolerancia hacia las prácticas políticas autoritarias, donde las decisiones se toman sin consultar a los ciudadanos. Esta falta de transparencia y diálogo se ha evidenciado en la modificación de espacios públicos sin considerar las opiniones de quienes más los utilizan”.
“El caso recuerda a la intervención controvertida de Dimas Martín Martín en 2003, cuando se destruyó una lengua de lava declarada Patrimonio Cultural para instalar baños, lo que resultó en un pronunciamiento ciudadano limitado en ese momento. Sin embargo, la situación actual difiere en que el catálogo municipal no refleja adecuadamente los aspectos sociales y comunitarios de los lugares, limitándose únicamente al valor arquitectónico”, considera Podemos.
“La iglesia de San Isidro Labrador en Uga, construida por decisión popular y con aportaciones de la comunidad, es un ejemplo destacado de la importancia del consenso y la participación ciudadana en proyectos locales. Sin embargo, el Ayuntamiento ha optado por procedimientos unilaterales que alejan la política municipal de la ciudadanía y limitan su capacidad de decisión sobre el futuro de su entorno. En este contexto, la convocatoria ciudadana para expresar el descontento ante las decisiones del Ayuntamiento demuestra el arraigo de un espíritu de lucha y participación heredado de generaciones pasadas. La comunidad de Uga se une para defender sus derechos y reclamar un proceso democrático y participativo en la gestión de su espacio vital”, concluye Podemos.