Logo

Consternación por la inesperada muerte de Pedro de Armas en Argentina

La sorpresiva muerte del empresario y ex político lanzaroteño Pedro Manuel de Armas Sanginés en Argentina conmocionó a la isla, que no daba crédito de su desaparición por un infarto que le sobrevino cuando estaba en el país sudamericano, donde tenía bienes. A primera hora de ayer, sábado, 29 de octubre, una persona cercana a la familia daba a conocer a este medio el fallecimiento, que publicó uniéndole el pesar de la directiva del Real Casino Club Náutico de Arrecife, del que fue presidente en los años 1991 y 1992 y miembro de sus equipos de vela.

Pedro de Armas, de 75 años de edad, era una persona muy conocida en Lanzarote no solo por su actividad política, que se inició con el PIL a principios de los años 90 del siglo pasado y se alargó durante 25 años, hasta que se retiró de la vida pública en 2015, cuando acabó su segundo mandato como concejal del Ayuntamiento de Arrecife por el PNL Nueva Canarias, donde fue uno de los firmantes de la moción de censura contra el socialista Enrique Pérez Parrilla que hizo alcalde al popular Cándido Reguera, ya fallecidos los dos también.

 Su primer cargo electo fue de consejero del Cabildo de Lanzarote, con el PIL, en 1995, lista encabezada por Juan Carlos Becerra, que tuvo que dimitir de presidente del Cabildo para evitar una moción de censura urdida por el líder de su partido, Dimas Martín, en connivencia con los socialistas para volver hacer presidente a Enrique Pérez Parrilla. La dimisión de Becerra permitió que Pedro Manuel de Armas fuera presidente durante seis meses, del mes de septiembre de 1996 a marzo de 1997, fecha en la que la justicia obligó a que se debatiera la moción de censura que llevó a Pérez Parrilla, por tercera vez, a la Presidencia del Cabildo. Fue consejero delegado de Inalsa también en ese periodo y de Gesplan, empresa pública del Gobierno de  Canarias, en la legislatura 1999-2003.

Pedro de Armas fue un empresario de éxito en el sector turístico, donde empezó de gestor y acabó como socio en una empresa con un importante complejo hotelero, donde hizo fortuna, antes de su salto a la política. Era también muy conocido por su destacada actividad musical en su juventud en la isla, gusto que mantuvo siempre,  y su exitosa experiencia deportiva en la vela, para la que tenía una especial habilidad, que lo mantuvo siempre cerca del mar y navegando.

El carácter abierto y desenfado de Pedro de Armas, muy dado al chiste, hasta el punto de que participaba todas las semanas en una tertulia radiofónica  que tenía una sección dedica a este género, le creaba amigos y contratiempos a partes iguales. Fue también director de los CACT durante la primera Presidencia de Dimas Martín en el Cabildo, y allí recibió la noticia de la muerte de César Manrique, en septiembre de 1992, que recibió con lágrimas al ser entrevistado por Agustín Acosta Cruz en su programa especial de radio. Volvió a llorar en público en 2002, cuando se le vinculó al barco negrero “Ocean King”, que llegó a Canarias con una veintena de subsaharianos a bordo ilegalmente provenientes de Mauritania, propiedad de unos familiares al que él prestó dinero para atender los gastos de la embarcación que se dedicaba a la pesca. Negó cualquier relación con esa actividad y lloró mientras se avergonzaba de que lo relacionaran con esos actos. “Soy un ñanga”, decía mientras lloraba por el equívoco policial y mediático.

Volvió a tener problemas cuando le intentaron cuestionar su patrimonio personal y adquisiciones inmobiliarias en Playa Blanca, cuando era alcalde del municipio de Yaiza su compañero del PNL, José Francisco Reyes, pero, a pesar del intenso trabajo del fiscal, nunca se pudo demostrar nada que cuestionara su integridad ética. En ese momento, sobre el 2012, a raíz de esa investigación, se supo que había comprado grandes extensiones de terreno en la región de La Rioja, en Argentina, donde también invirtieron otros empresarios de Tías y Yaiza.

 

elperiodicodelanzarote.com