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Tomás López (Somos): "Lo primero que haría es poner en marcha planes específicos de empleo joven y para desempleados de larga duración"

El candidato de Somos Lanzarote al Cabildo de Lanzarote presenta el paro como principal enemigo a vencer y plantea la posibilidad de gobernar con cherencia

 El candidato de Somos Lanzarote a la Presidencia del Cabildo, el periodista e historiador Tomás Lopez, explica lo ideales que mueven a los partidos y personas que conforman Somos y profundiza sombre su programa y objetivos. Además, afirma que están abiertos a gobernar con coherencia y para resolver los problemas de la isla y analiza por qué no se llegó a una confluencia con Podemos.

En SOMOS LANZAROTE confluyen partidos como Alternativa Ciudadana, Alternativa Democrática, Partido Verde Canario, ANC... los dos primeros tiene representación en las instituciones y otros son más pequeños. ¿No es un poco arriesgado sacar una nueva marca como SOMOS a pocos meses de las elecciones?

Sí, por supuesto. Nosotros no venimos montados en una ola, ni controlamos medios de comunicación, ni tenemos el presupuesto de los partidos tradicionales. Fijar una marca de un movimiento hecho desde la isla y desde abajo, sin dependencias de ningún poder, es una tarea complicada, algunos dirían que utópico. Y sin embargo, mucha gente responde, tenemos al equipo de gente más valiosa que podíamos imaginar, muchos de ellos jóvenes, tirando de este carro contra viento y marea. Quiero pensar que si eso ocurre, si hasta las encuestas realizadas a pocas semanas de presentar la marca ya muestran el crecimiento y nos incluyen, es porque un movimiento como Somos Lanzarote es necesario para esta isla. Hay mucha gente que sabe que el cambio no lo construyen ni las olas televisivas ni los cheques bancarios para pagar campañas, sino la gente que se organiza y lucha por un proyecto de sociedad y futuro, desde el sitio en donde vive. Eso es Somos Lanzarote.

No confluencia con Podemos

- ¿Qué sensación te produce que no se haya llegado a una confluencia con Podemos?

En Somos Lanzarote confluyen cinco organizaciones y muchas personas de manera individual, lo cual es un paso muy importante, aunque es una lástima que a este frente no se hayan sumado otros, que preveían que con la marca les bastaba. Que en municipios pequeños, como Yaiza, donde hay tanta fractura social, tanta indignidad política, tantas sospechas sobre las instituciones, en definitiva, tanto tufo... que hasta en sitios como ese los partidos transformadores no sean (o seamos) capaces de unir fuerzas... da hasta vergüenza. ¡Resulta que en UPY se han mezclado todos para defender sus intereses y nosotros, que queremos cambiar las cosas, vamos por separado! Hablo de Yaiza porque fui personalmente, como parte de Somos Lanzarote, hasta Playa Blanca a hablar de confluencia con la gente de Podemos allá. Nos ponían dos condiciones: primarias y acatar su código ético. Les dijimos que no habría problemas. Daba la impresión de que había predisposición. Y al día siguiente celebraron una asamblea a la que asiste la dirección insular de su partido y nos dicen que van por su cuenta. Que en ciudades como Madrid o Barcelona, con la población que tienen y la centralidad que ocupan en el Estado, hayan confluido con otras fuerzas, en marcas "neutras", en frentes amplios como "Ahora Madrid" o "Barcelona Común", con algunas opciones de ganar, mientras en esta islita haya quien no ha confluido con nadie, es verdaderamente penoso. Sobre todo porque estoy convencido de que la mayoría de la gente simpatizante de ese partido hubiese preferido la unión. Pero este camino es largo y la tarea es compleja: construir la otra isla posible, entre todos. Con ese objetivo, en Somos Lanzarote seguiremos trabajando por la unidad de las fuerzas transformadoras tras las elecciones, construida desde aquí, sin que nos pueda "el fetichismo de las siglas", que le llamó Pablo Iglesias.

 Hablemos de propuestas: ¿qué prevén hacer con el desempleo, la principal preocupación de los lanzaroteños?

En Somos Lanzarote partimos de una premisa, de la que los partidos tradicionales parecen no querer enterarse: el actual modelo económico no sirve. Solo de turismo, y de un solo tipo de turismo, el de sol y playa, y cada vez más barato, no podemos vivir todos los que estamos en esta isla. Este modelo económico lleva años expulsando a jóvenes formados y valiosísimos a la emigración, y condenando a casi un tercio de la población a la desesperación que supone el desempleo. Hay que diversificar la economía, generando nuevos nichos de empleo. Cuanto antes nos pongamos, antes saldremos de esta. Pero mientras eso ocurre, hay que poner la atención, desde el primer minuto, en aquellos que peor lo están pasando, los que más dificultades tienen. Por eso hemos diseñado dos planes concretos: uno de empleo juvenil, para dotar a nuestros pibes, a través del sector público o de convenios, de la experiencia necesaria para enganchar con el mercado laboral; y otro dirigido a parados de larga duración, en el que la institución esté al lado de esa gente valiosa en el reciclaje y la reformulación de sus trayectorias laborales. Esos dos ejes, junto a una lucha decidida por el respeto de los derechos laborales y la colocación de la lucha explotación laboral en la agenda política serán fundamentales para que haya más y mejor empleo en esta tierra.

Diversidad económica

Hablaba antes de diversificación económica. ¿De verdad cree que es posible vivir de otra cosa que no sea el turismo en Lanzarote?

No es que sea posible, es que es necesario. A no ser que decidamos resignarnos a que casi un tercio de la población esté parada. Con los hoteles llenos esa es la cifra: casi un tercio de la población activa desempleada. Pero nosotros no decimos que el turismo no nos valga. Lo que pasa que esta gente que gobierna solo piensa en un tipo de turismo, porque ha sido el que ha ingresado "dinero fácil" durante mucho tiempo. En Lanzarote hay que potenciar otros tipos de turismo, como el cultural o el ecoturismo. Y junto a ello, promocionar la agricultura, con proyectos como el que tenemos en Somos Lanzarote de recovas, mercados de avasto, o de pequeñas industrias transformadoras que dan salida a nuestros productos. También hay que creer en las energías limpias, porque está por delante el reto de hacer de Lanzarote y Canarias el paraíso de las renovables. O aprovechar las ventajas que nos debería reportar nuestra situación geoestratégica, si dejásemos, por ejemplo, de dar la espalda a África. En definitiva, hay varios motores de desarrollo y empleo posibles. Toca ponerlos en marcha.

Algunos partidos que han confluido en Somos Lanzarote, como la propia Alternativa, han llevado durante años la bandera de la lucha contra la corrupción. ¿Qué pasa con la corrupción en Lanzarote y qué habría que hacer para acabar con ella?

Empiezo por el final: para acabar con la corrupción un buen primer paso podría ser votarle a Somos Lanzarote. Y no es ningún reclamo electoral, es que si la gente sigue apoyando a quienes toleran los indicios de corrupción esa corrupción seguirá existiendo. Aquí hay un grupo de personas y de organizaciones que han demostrado ser coherentes en esa lucha. Respecto a qué pasa en Lanzarote... hay quienes tienen una visión pesimista de la isla, como si la corrupción fuese algo consustancial a esta tierra y su gente. Yo creo que no es así. Lanzarote está llena de gente honesta que se levanta a trabajar cada día,  o a buscar trabajo, honradamente. Pasa que hemos tenido un modelo económico basado en la especulación y el pelotazo que, junto a cierta permisividad social, fruto posiblemente de la inmadurez democrática, ha llevado a unos pocos a robar a mansalva dañando nuestra imagen de conjunto. Pero hay que ser optimistas. Sin optimismo no merece la pena la lucha: esta tierra tiene un futuro de honestidad por delante.

¿Son ustedes una fuerza que quiere gobernar o preferirán fiscalizar desde la oposición? ¿Con quiénes pactarían?

¿Usted no ve todas las propuestas que traemos? Claro que queremos trabajar y aplicar un programa de transformación para la isla. Para eso hay que gobernar. Pero gobernar con coherencia y creyendo en el cambio, no en un "todo vale" que perpetúe la actual situación. ¿Y qué es cambiar? Pues por ejemplo, decir rotundamente que no queremos sospechosos de corrupción  en nuestras instituciones, o defender el interés de la gente por encima de una multinacional petrolera o de un empresario hotelero. Quien venga dispuesto a cambio, que cuente con Somos Lanzarote.

Para acabar: si mañana accediese a la presidencia del Cabildo, cuáles serían sus primeras medidas a tomar.

La primera, como comentaba, poner en marcha planes específicos de empleo joven y para desempleados de larga duración. La desesperación de esos dos grupos de población merecen respuesta inmediata por parte de las autoridades más cercanas. La segunda, abrir gavetas, auditar cuentas y exponer los datos de la administración pública con absoluta transparencia. Es una vergüenza el nivel de oscurantismo que ha demostrado el cabildo de Lanzarote, una de las instituciones menos transparentes del Estado. Y después, o mejor al mismo tiempo, reducir gastos superfluos, basados casi siempre en privilegios políticos: se tienen que acabar los asesores a dedo, el clientelismo y los sueldos fuera de la realidad en la que vivimos. Las instituciones son para servir a la gente y no para servirse.

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