¿Qué ha pasado con las casas de Titerroy y de Valterra? (I)
La primera respuesta es clara: En Lanzarote tenemos políticos de pacotilla, y me incluyo
- Escrito por Lorenzo Lemaur
Afrontamos otro primer jueves de mes en el que el Foro contra la Violencia de Género de Lanzarote deberá permanecer en casa con su pancarta plegada, su reivindicación enmudecida y la frustración y la impotencia cobrando protagonismo.
Nos apuntamos a cualquier “rebaño” sin conocer el quid de la cuestión o el fondo del asunto. Embobados por el sumo “pastor” de las redes sociales, seguimos tendencias por un criterio muy objetivo: el número de ‘me gusta’ que tengan. Asimismo firmamos manifiestos sin leer su contenido arrastrados por un encabezado que nos parece “justo”. ¿Cuántas peticiones de la plataforma activista online Change.org han pasado por nuestros teléfonos y hemos firmado sin saber realmente qué reivindicamos?
El día del Orgullo Gay, conocido como Día del Orgullo LGTBIQ donde incluimos a colectivos de lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, queers.. se celebra el 28 de junio y tiene su origen en los lamentables incidentes ocurridos en 1969 en el pub neoyorquino Stonewall Inn. Situado en el Greenwich Village, un local que era frecuentado por homosexuales. La madrugada del 28 de junio, el Departamento de Policía de Nueva York realizó una redada en ese establecimiento, pero por primera vez en la historia se negaron a aceptar un sistema que los trataba como parias y que violaba sistemáticamente los derechos más fundamentales de las personas.
Aprender la experiencia de lo vivido es una regla básica de la vida. El continuo aprendizaje nos llega con las situaciones que nos toca vivir. Es obligación recoger aciertos y errores, para saber cómo se deber actuar… Pero parece que a muchos se les ha olvidado esta regla tan simple. Nos hemos instalado en la política de la crispación continuada, en el insulto constante y en la destrucción del adversario. Hay quien parece que aún no se ha dado cuenta de que la situación es tan complicada que lo que menos ayuda en estos momentos es la confrontación.
Y aunque tenga IVA y no esté de oferta. Antes, el desarrollo de un país se medía con indicadores puramente económicos determinantes de su “riqueza”, como el Producto Interior Bruto (PIB), el valor de todos los bienes y servicios producidos en el interior de una economía en un periodo determinado, así lo resumen profesores de macroeconomía aunque ya su cálculo sea un asunto mucho más complejo, hasta que, ¡zas!, en el año 90, Naciones Unidas estableció un protocolo para medir el IDH (Indicador de Desarrollo Humano) de cada país, y ahí es ‘cuando la puerca tuerce el rabo’, dice el refrán popular para dar a entender claramente el punto en el que una situación se complica o directamente se jode.
Al igual que la Cultura, el paisaje o la gastronomía, los eventos deportivos generan valor añadido a los destinos turísticos.
Desde luego no me creo Martin Luther King, pero sí tenía y tengo un sueño para San Bartolomé.
Los gurús del marketing y la planeación estratégica apuntan a sacar el máximo provecho de situaciones adversas rentabilizando las oportunidades que de ellas se desprendan para crecer o sobrevivir. Empresas sin mercado, por tanto, sin productos o servicios que ofrecer, no tienen razón de existir. Nos guste más o menos, es la realidad de la economía de mercado.
Todos hemos visto como la fauna recupera lo suyo, regresando a su hábitat natural. Los ecosistemas se han recuperado a una velocidad asombrosa debido al confinamiento humano.