LAS GUAGUAS, "SÍ, GUANA"
- J.B.C.
Lo más sorprendente de todo es que el Cabildo se enfrenta a los taxistas de los municipios socialistas con una actitud chulesca reconociendo que no tiene competencias en este sector. En cambio, donde sí tiene competencias, en el transporte interinsular de guaguas, que funciona como el pompi (para no poner culo, que suena peor), parece un corderito degollado. Mientras a unos les niegan las reuniones, con los otros no para de hacerse fotos para ocultar una realidad que se denuncia todos los días. En el caso de los taxistas, dice que quiere reunirse con los usuarios; en el caso de las guaguas, le basta con la opinión de la concesionaria y los técnicos, que no se pueden cuestionar, como si en Lanzarote los técnicos hubieran impedido alguna vez que se hicieran las faramallas que hemos sufrido, enriqueciéndose muchos de ellos a la par que los políticos.
Al parecer, lo que están pidiendo los trabajadores de esta isla para poder reducir sus gastos de movilidad es un taxi en la puerta de su casa y no más guaguas, más paradas y más rutas de un transporte público colectivo que encima ahora es gratuito.
Tenemos cada día más la impresión de que el ataque a los taxistas pretende ocultar su incapacidad para dotar a Lanzarote de un sistema de transporte público colectivo eficiente. Tienen las competencias para ello y cerca de 300 millones de euros para hacerlo bien y el grupo de gobierno anterior les dejo el pliego casi hecho. Y se han pegado dos años dando largas y de fiesta, mientras se le prorrogaba el servicio a la concesionaria y los usuarios a la gresca porque el servicio es deficitario. Donde tienen todas las competencias, dos años sin hacer nadita. Y donde no las tienen, a enfrentar al sector. Todo un ejemplo de gestión. Si las guaguas funcionan como debieran, hasta taxis sobraban con los actuales. Hasta coches de alquiler. Hasta coches de particulares. Pero eso no interesa, eso ni se toca. ¡Quita, quita!