El hambre no puede esperar
Las consecuencias económicas y sociales derivadas de la Covid-19 están sacando a la luz los graves padecimientos de hogares enteros que lo están pasando muy mal y no tienen ni para comer, agravando las situaciones de marginalidad y pobreza que ya sufríamos en Lanzarote. Como el hambre no puede esperar, las administraciones públicas más cercanas y que mejor conocen la realidad más próxima, como son el Cabildo Insular y los ayuntamientos, se vuelcan para que lo más indispensable no falte en cada casa, la comida, ayudando también a las ONG que atienden a las personas más necesitadas para que puedan seguir realizando su encomiable labor.
- Escrito por Fco. Manuel Fajardo Palarea, senador del PSOE por Lanzarote y La Graciosa