¡Acabemos con los malditos bulos!
Los bulos siempre han existido pero con la misma facilidad que se propagan, los podemos desmontar con escaso esfuerzo.
- Escrito por Fernando Pellicer Melo, docente y Licenciado en Historia.
Los bulos siempre han existido pero con la misma facilidad que se propagan, los podemos desmontar con escaso esfuerzo.
Antes de que el dedo acusador de algún liberal envuelto en la bandera tricolor me señale como un traidor a la patria, aclaro que se hace absolutamente necesario, no solo la implicación del Gobierno de España en la recuperación económica de Canarias, sino también que la Unión Europea deje de actuar como un consejo de administración y se descubra a sí misma como la verdadera arquitecta del Estado del bienestar y, quizá porque ya no tenga otra salida, tendrá que reconocer que la economía no es una ciencia exacta.
La crisis que está sufriendo prácticamente toda la humanidad y, particularmente nuestro país y Canarias por el Covid-19, no tiene parangón. A pesar de las sombras, que no son pocas, en la gestión estatal de la crisis sanitaria, lo cierto es que la impresionante labor que se está llevando a cabo por nuestros Sanitarios, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y, en general, por todas esas personas que sostienen los servicios esenciales, es un rayo de esperanza para poder levantarnos con más fuerza y determinación.
El 6 de abril de 1995 por el Gobierno de Canarias se promulgó la Ley 8/1995 de Accesibilidad y supresión de Barreras Físicas y de la Comunicación para las personas que tengan limitadas sus posibilidades de movimiento y/o de comunicación.
Durante tres semanas, quienes apoyamos al Gobierno desde los grupos parlamentarios del PSOE en el Congreso y en el Senado, por responsabilidad, hemos asistido en silencio y confinados en nuestras casas a la propagación del virus del odio, la mentira y la manipulación. Este mal es un viejo conocido de las democracias. Sabemos cómo ataca, cómo trata de inocularse en el tejido social y cómo, envuelto en la nada patriótica bandera del cuanto peor mejor, dice al mismo tiempo una cosa y su contraria para llegar al poder. Para usurparlo si fuera preciso.
Después de unos días muy complicados que han requerido de todos nuestros esfuerzos para poder organizar el retorno de nuestros turistas a sus lugares de origen, podemos decir que a día de hoy Lanzarote está cerrado turísticamente.
No dejar a nadie atrás. Una consigna que desde los gobiernos, tanto estatal como el de Canarias, no se deja de repetir y que en estos días de crisis sanitaria y social, por solidaridad, pero también por pura supervivencia, nos obliga a tomar medidas contundentes para que sea una realidad.