Top Secret

Algo se está moviendo en Canarias, también en Lanzarote. La creciente degradación de la calidad de vida de los ciudadanos a la par que crece la llegada desorbitada de turistas, que solo incide en las cuentas empresariales y en agravar las deficiencias de los servicios, ha empujado a la población a movilizarse. Ya hay manifestaciones previstas para este mismo mes y crecen los movimientos en redes sociales posicionándose  en esta lucha.

Las desavenencias sobrevenidas entre Nuevas Canarias y UPY después del éxito cosechado en las últimas elecciones tienen sus connotaciones analizables. Por una parte, sorprende que Nueva Canarias repita una y otra vez los mismos errores dejándose llevar por los cantos de sirenas de sus pupilos en Lanzarote, que han demostrado saber lo mismo de política que de los efectos de la miel de palma en el tratamiento de las hemorroides. Creyeron a Armando Santana que él iba a pasar de “uno a mil” concejales en Arrecife y ya no está ni en la política. Y ahora creen que el discurso tan ruidoso como vacío de Yoné Caraballo será suficiente para repetir un resultado que solo deben, en gran parte, a UPY, al MRT de Tinajo y a los votitos que tenía “medio comprados” Armando desde el Ayuntamiento de Arrecife que, aunque fueron insuficientes para repetir en el Ayuntamiento sí sumaron al Cabildo y al Parlamento. Pero las historias políticas se escriben así.

La Semana Santa llega al municipio de Yaiza cargada de fervor, teatro y “levantamiento popular”. O eso parece. Por una parte está la espectacular obra teatral al aire libre “Matar a Jesús” que está llamada a convertirse en una referencia insular en estas celebraciones anuales y, por otra, están las típicas misas y procesiones que hacen todas las parroquias en conmemoración de unos acontecimientos fundamentales de la historia de la religión católica. Pero este año se suma el “levantamiento” de vecinos y vecinas de Yaiza por el derrumbe de sus tradicionales muritos de la plaza de la iglesia que corona el centro del bonito pueblo sureño.

La concejala de Deportes de Arrecife, la popular Eli Merino, que ya pasará a ser recordada si consigue que el Pabellón de Árgana Alta vuelva a abrirse al público, después de más de 15 años cerrado y varios proyectos fallidos para rehabilitarlo, se está tomando el deporte muy en serio, aunque no sea una persona que venga del sector.

Los que tenían alguna duda de que el tiempo pasará y Oswaldo Betancort no solucionará ninguno de los problemas clave que tiene esta isla, ya lo tienen un poco más claro después de su forma de afrontar la mejora de la movilidad insular. Su primera decisión en este sentido fue darle  dos años más de “disfrute del negocio” a la empresa concesionaria de las guaguas sin especiales exigencias. La excusa es que quieren tiempo para preparar un buen pliego. ¿Pero cuál es la realidad? ¿Se querrá más a la empresa concesionaria que garantizar un servicio de transporte colectivo de calidad para todos los lanzaroteños? Veremos.

El fallecimiento de José Ismael Bonilla Pérez, de 47 años de edad, en la madrugada de ayer domingo, al sufrir un accidente de tráfico al salirse de la vía en La LZ-2 en el tramo de Tías – Mácher, localidad de la que era vecino, ha conmocionado a los vecinos de todo el municipio.

Que el presidente del Cabildo cualquier cosa que toca lo convierte en una fiesta es ya conocido pero que invite a la “boda” a todo el mundo menos a la “novia” no tiene un pase. El acto de presentación del documento inicial del Plan Especial de La Geria a bombo y platillo, como si estuvieran presentando el documento definitivo del mismo, ya dice mucho del populismo y demagogia de Oswaldo y su cuadrilla. Pero lejos de estar más cerca la solución al problema, ese acto en sí ha hecho saltar las alarmas al verse que no había nadie del PP, socio de CC en el grupo de gobierno del Cabildo y pieza fundamental para aprobar en pleno el documento con la necesaria mayoría absoluta. Al parecer, los populares se enteraron por la prensa de la convocatoria pública y en ningún momento recibieron la invitación del presidente ni del consejero de Urbanismo, el nacionalista Jesús Alexander Machín, que fue quien llevó la voz cantante en el acto.

Mientras el Cabildo paga todos los meses más de 40.000 euros por tener almacenados los aerogeneradores en el puerto de los Mármoles que tendrían que estar instalados en el parque eólico de El Monte, al lado de los ocho que ya están allí, el presidente se entretiene haciéndose fotitos con perros que dice que van a visitarle al Cabildo. Ya van siete meses, más de 280.000 euros gastados en balde. ¡Y lo que queda! Tiran el dinero público como si no fuera de nadie. Nada se sabe del informe medioambiental que paraliza la instalación de esos molinos ni de las acciones que está haciendo el Cabildo para agilizar una solución al problema que cuesta dinero contante y sonante todos los meses y que evita que Lanzarote mejore su producción de energía alternativa. Pero eso no le importa a nadie.

El secretario general del PP de Lanzarote y vicepresidente del Cabildo, Jacobo Medina, fue muy clarito al desmentir su propósito o el del alcalde de Arrecife, Yonathan de León, de querer sustituir a Astrid Pérez en la Presidencia Insular de su partido.

Realmente, la actitud de nuestros políticos frente a los problemas no tiene nombre. El caso de Las Grietas de Montaña Blanca es todo un ejemplo. La visita incontrolada del lugar por parte de los turistas, que van en busca de este espacio llevados por las redes sociales, es un claro peligro. En una carretera general, la que une Tías con San Bartolomé, durante todo el día se repiten maniobras peligrosas con los coches, aparcamientos en doquier y peatones yendo de un lado a otro de la vía sin control, lo que provoca situaciones de riesgo.

Se puso una señal de prohibido aparcar pero los turistas como si oyeran llover. Y así sigue. Hasta que haya una desgracia. Lo único que han hecho, como teórica medida disuasoria, es abrir una zanja en el borde de la carretera para que no aparquen. Pero lo turistas siguen aparcando, y ahora lo hacen de peor manera todavía. En fin, con lo fácil que parece ordenar el espacio, habilitar un aparcamiento en la zona alta de la carretera y hacer una campaña en redes para reubicar a los visitantes. ¡Algún día afrontarán el problema, seguro que sí! Esperemos que no sea después de que se produzca una desgracia.